1. Puedes usar el baño sin cerrar la puerta.
2. Y no necesitas colocar el papel higiénico en su soporte.
3. No tienes que saludar a nadie hasta llegar a la oficina.
4. Puedes hacer todas las cosas embarazosas y grotescas que quieras sin temor a ser juzgado.
5. ¿Eres un Belieber secreto? Canta a grito pelado.
6. No tienes un compañero de cuarto que te vea cuando estás demasiado borracho como para funcionar.
7. Puedes dejar tu ropa en el baño por días.
8. No tienes que dar explicaciones a nadie antes de traer a casa a alguien especial.
9. Cuando derramas algo sobre tu sofá, puedes conseguir uno nuevo sin tener que preguntarle su opinión a nadie.
10. Cuando tu sábana ajustable se zafa de tu cama puedes ignorarlo y acostarte en el colchón descubierto durante semanas.
11. No tienes que fingir que no escuchaste a tu compañero de cuarto tener sexo con su novio/a.
12. Y cuando rompan, no tienes que preguntarle amablemente a tu compañero de cuarto cuándo fue la última vez que se bañó.
13. Nunca tienes que esperar a que alguien salga del baño para hacer pipí o bañarte.
14. Hablando de no tener compañeros de cuarto, ¿te has dado cuenta que parece que nunca tienes tantas bolsas de palomitas como recuerdas? ¡No hay problema! Nadie se va a robar tus golosinas y cosas ricas.
15. No tienes que cubrir tu apartamento con notas pasivo-agresivas.
16. No tienes que compartir la televisión, así que puedes hacer fiestas televisivas improvisadas.
17. Nadie grabará sobre el juego que estabas jugando en tu Xbox.
18. No tienes que tener una conversación casual cuando simplemente preferirías estar solo.
19. Y lo más importante, no necesitas usar pantalones jamás.
