Aquí está Toco el gatito con su más que adorable hermana.
Se conocieron cuando eran bebés e inmediatamente se llevaron bien después de una buena siesta.
A su corta edad demostraron un increíble talento en la sección de los abrazos.
Nadie puede acurrucarse o abrazar mejor que estos dos.
Pero a medida que han ido creciendo, ha quedado claro que este dúo está destinado para hacer travesuras enormes.
Han comenzado a intentar este tipo de experimentos, probando la regla de "si-quepo-me-siento".
Y les gusta tranquilizarse y relajarse con un juego de futbolito.
Sin embargo, para lo que estos dos son los mejores, es para encontrar aventuras.
Incluso los lavabos son bastante fascinantes cuando estos dos los exploran juntos.
